Con respecto a los horarios de salida de nuestros hijos surgen verdaderos problemas. Si les decimos alas 11, nos dicen: a fulanito le dejan hasta las 12, y sin averiguar si es cierto aceptamos con tal de que no vuelva solo. El otro le dice lo mismo a sus padres y así nos manejan a su antojo.
Tenemos que tener en cuenta que no es normal que los menores de edad salgan de casa cuando nosotros ya casi nos disponemos a ir a domir. En nuestras manos está el cambiar este hábito e inculcarle otros más saludales. Debemos poner límites razonables a cada edad y si nos chantajean con que tendrán que volver solos y si le ocurre algo será por nuestra culpa, tenemos la opción de ir a recogerle(dos calles antes eso sí, "porque si te ven sus amigos se mueren"). Si evitamos que los menores estén en la calle después de las 12 estaremos velando por su salud, ya que las peleas y enfrentamientos suelen ocurrir después de esta hora. Tenemos la obligación de cuidar de ellos y aconsejando salir más temprano, ya que está todo abierto, cuidamos de su vida. La noche incita más al consumo de alcohol y tonteo con las drogas. No es nada fácil pero se puede conseguir si somos constantes y no somos perezozos, porque hay quien les deja por no tener que ir a recogerlos.
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Una de las frases que nuestros hijos utilizan es famosa por su imaginación, "si no salimos a las 12 nos hacéis marginados sociales", se esta poniendo de moda que la "marcha" empieza a las 12 o la una de la madrugada, nosotros como padres nos enfrentamos a ello y sufrimos por ello pues debemos preocuparnos por ellos. Este tema lo debemos afrontar con una dualidad que nos permita a la vez educar e instruir a nuestros hijos pero igualmente marcar la normas de "juego" entre nosotros, pues no podemos renunciar a nuestra responsabilidad de padres, el como lo hacemos es la cuestión;
ResponderEliminarExpongo algunas ideas:
- Instruir y educar de las situaciones que pueden ocurrir y que deben de eludir, a pesar de ser acusados de pesados por nuestros hijos, pero seguro que cuando vean una situación como la que les hemos prevenido se acordarán del consejo.
- Marca reglas: Es evidente que las horas son para determinadas edades, pongamos 16 años y los fines de semana, exceptuando la edad en situaciones concretas y nosotros presentes, esas reglas de salida van acompañadas de elementos de control:
- llamadas de telef. cada cierto tiempo.
- conocimiento de la compañia y de los lugares donde van a ir.
- que ellos conozcan donde estamos para acudir en caso de recogida o necesidad.
Todo esto es una rutina que se debe llevar desde el momento en que comienzan a salir, se puede ver como un control pero en realidad es un elemento de seguridad mutúo entre padres e hijos.
Estoy totalmente de acuerdo. Hay temas que no son negociables, entre ellos pienso que está su seguridad, que es nuestra responsabilidad, al menos ahora que son menores de edad.
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